“Si amamos a Dios sobre todas las cosas, inmolémonos por Él. Si amamos al prójimo como a nosotros mismos, démosle la Fe, nuestro mayor Tesoro” – Plinio Corrêa de Oliveira
Especiales
En Lima, la Virgen del prodigioso llanto
La noticia corrió como reguero de pólvora... y no era para menos. La Imagen Peregrina Internacional de Nuestra Señora de Fátima, la Virgen que derramó lágrimas milagrosamente en Nueva Orleans, estaba de visita en nuestra Capital. Recordemos en estas líneas aquel maravilloso suceso que conmovió a Lima en la primera semana del mes de julio de 1983.
¿El amor que Dios tiene de Sí mismo, es un amor egoísta?
Cuando pretendemos aplicar a Dios conceptos que conciernen apenas a la criatura humana, caemos en una maraña de la cual no salimos nunca. Es como un ovillo del cual se perdió la punta: por más que jalemos los hilos de aquí o de allá, no conseguiremos desenredarlo.
Las modas en la iglesia: licitud del juicio moral de terceros
Las modas descritas en la pregunta anterior son inmorales y deben ser reprobadas sólo por ese motivo, pero aún mucho más si las personas así (des) vestidas van a recibir a Nuestro Señor en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía. ¡Es una profanación! ¿Qué hacer para cambiar eso?
San Ignacio de Loyola - Fundador Compañía de Jesús Ejercicios Espirituales
El papel de los jesuitas en la Contra-Reforma católica fue esencial. En la época, parecían perdidas para el protestantismo no sólo Alemania, sino Escandinavia, y amenazados los Países Bajos, Bohemia, Polonia y Austria, habiendo infiltraciones de la secta no apenas en Francia sino hasta en Italia.
+1879 + Nevers - Francia. Nació en Lourdes (Francia) en 1844. Hija de padres supremamente pobres.
Desde el 11 de febrero de 1859 hasta el 16 de julio del mismo año, la Santísima Virgen se le aparece 18 veces a Bernardita. Nuestra Señora le dijo: "No te voy a hacer feliz en esta vida, pero sí en la otra".
El 16 de abril de 1879, exclamó emocionada: "Yo vi la Virgen. Sí, la vi, la vi ¡Que hermosa era!" Y después de unos momentos de silencio exclamó emocionada: "Ruega Señora por esta pobre pecadora", y apretando el crucifijo sobre su corazón se quedó muerta. Tenía apenas 35 años.