El Perú necesita de Fátima ¿Y tú sufres mucho? No te desanimes. Yo nunca te dejaré. Mi Corazón Inmaculado será tu refugio y el camino que te conducirá hasta Dios.
CampañasTienda VirtualTesoros de la FeDonaciones



«Tesoros de la Fe» Nº 165 > Tema “Ambientes, Costumbres, Civilizaciones”

Ambientes Costumbres Civilizaciones  [+]  Versión Imprimible
AbcAbcAbc

Guillermo II y
la emperatriz Sissi

Soberano prototípico de su época rinde homenaje a los “modales llenos de dignidad y a la postura magnífica que caracterizaban a la emperatriz”

Plinio Corrêa de Oliveira

El emperador Guillermo II,1 en el episodio que voy a comentar, era aún el príncipe heredero del Imperio Alemán. Alemania en la época de la Primera Guerra Mundial en amplia medida fue modelada por la actuación del Káiser — tipo humano perfecto del noble actualizado de fines del siglo XIX y de las primeras décadas del siglo XX.

Emperatriz Sissi

Mientras que la emperatriz Sissi,2 esposa de Francisco José, soberano del Imperio Austrohúngaro, representaba el pasado.

¿Cuál es el efecto que tal pasado produjo sobre el futuro Káiser, considerado un hombre moderno de aquel tiempo? ¿Cómo la tradición es vista por un hombre más pobre en tradición frente a una persona más rica en ese sentido?

La cuestión es muy interesante para comprender cómo se ejerce la continuidad familiar y también cómo es la irradiación de la nobleza sobre el tipo humano de la nobleza.

El Káiser, en su libro de memorias “Mis recuerdos”, narra su encuentro con la emperatriz Sissi:

“Un recuerdo de la emperatriz permaneció indeleble en mi memoria. Un día, la gran dama vino a tomar el té en casa de mi madre, en Hetzendorf. Yo estaba ocupado exactamente en escribir mi diario, lamentablemente perdido hacia mucho tiempo, cuando mi madre me hizo llamar en el jardín donde ella paseaba con la emperatriz. La emperatriz me saludó con su esmerada amabilidad corriente y mi madre me ordenó llevar, durante el paseo, la larga cola del vestido de Su Majestad. Acepté con entusiasmo la ejecución de ese suave servicio de paje y admiré sus modales llenos de dignidad y el porte magnífico que caracterizaban a la emperatriz. Ella cumplía al pie de la letra todas las exigencias del antiguo ceremonial de las cortes: no se sentaba, sino se colocaba majestuosamente; no se levantaba, sino se elevaba; no caminaba, sino avanzaba con dignidad. Este es el mejor modo de calificar el ritmo precioso que orientaba todos los movimientos de la soberana”.

Emperador Guillermo II de niño

Resaltan bien los trazos del noble: una amabilidad esmerada. Refinada no apenas en cierta ocasión, sino normalmente así. También se puede notar la jerarquía. Su madre ordenó“llevar la larga cola del vestido de Su Majestad”. En el palacio, la Káiserina debía tener cuantos lacayos quisiese, pero era tal su respeto por la emperatriz visitante, que mandó al príncipe heredero cargar su cola. Y él no se sintió disminuido en la función de paje, sino, al contrario, admiró la dignidad y el porte magnífico de la emperatriz. La nobleza debe ser así. Todo lo que él admiró era un efecto del ceremonial antiguo de las cortes.

El lenguaje del Káiser es muy rico, refleja bien la substancia de lo que estaba viendo. Él indica que todos los movimientos de la emperatriz eran así, y no apenas aquellos de andar y sentarse a los cuales se refiere. La soberana no andaba como cualquier persona, sino “avanzaba con dignidad”.

Este episodio revela cómo la emperatriz Sissi ejercía un efecto enorme sobre la educación entera de un pueblo y que para alcanzar este alto grado de refinamiento es necesario que haya una dinastía para elevarlo todo hasta ese altísimo nivel. 

Notas.-

1. Federico Guillermo Víctor Alberto de Hohenzollern (1859–1941)

2. Isabel Amalia Eugenia de Wittelsbach (1837–1898)



  




Artículos relacionados

La Catedral de San Marcos
Si quieres la paz, prepárate para la guerra
Amor y Temor en la Piedad Cristiana
Neuschwanstein el sentido del combate y de la dignidad hidalga
La impregnación de las alegrías de la Navidad
Tranquilidad del orden, excitación en el desorden
Vejez: ¿decrepitud o apogeo?
Dos modos de ver la vida del campo
La grandeza del rey dignifica al cocinero
La Catedral de Reims







Informe de sus aportes a la Alianza de Fátima ¿Necesita que alguien rece por usted? Advocaciones marianas en el Perú Suscríbase a nuestro boletín


COVID-19
¿El coronavirus es un castigo divino?
La pandemia y los grandes horizontes de Fátima
Mons. Athanasius Schneider: Nos gloriamos en las tribulaciones
Remedio seguro contra la “coronafobia”
Cardenal Raymond Leo Burke: Mensaje sobre el combate contra el coronavirus



Peregrinando
Nuestra Señora de la Buena Guardia
Fiesta de la Purificación de María Santísima
El galeón sumergido: símbolo de la esperanza
Loreto, la nueva Nazaret
El Milagro del Sol
San Nuno de Santa María
En la lucha contra el jefe del orgullo sigamos al Príncipe San Miguel
La sagrada Rosa de la Ciudad de los Reyes
La devoción al Inmaculado Corazón de María
El Jardín de Picpus
La gracia de Fátima actuando en Ucrania
Nuestra Señora de la Cabeza Inclinada
La crucifixión y muerte de Jesucristo
Confianza en María Inmaculada aun cuando todo parezca perdido
En este siglo de confusión, oh Madre del Buen Consejo, ruega por nosotros
Navidad
Fátima y el comunismo: dos profecías irreconciliables
150 años de la Comuna de París
San Juan Masías
Rosa de Santa María
Iglesia y Estado: ¿unión o separación?
Remedio eficaz contra los males contemporáneos
Las glorias de María
Santo Toribio de Mogrovejo
La Sagrada Túnica de Nuestro Divino Redentor
Santa Bernadette Soubirous
Corrupción en la sociedad: ¿Existe una solución?
Fiesta de gloria y de paz
Intransigencia de los Santos: irreductible fidelidad a su misión
Cristiandad
El ángel de la guarda, nuestro verdadero amigo
La Asunción de María Santísima
¡Vade retro Satanás!
El Santísimo Sacramento de la Eucaristía
La Madonna de Monte Bérico
Remedio seguro contra la “coronafobia”
El Hijo de Dios condenado por el más arbitrario de los procesos
Santa Jacinta de Fátima: Centenario de su fallecimiento (1920-2020)
La actitud católica frente a la muerte y la concepción materialista
¿Cómo rezar bien el rosario en honor a la Virgen María?
Grandezas y glorias de San José
Presencia diabólica en el mundo de hoy
Los rostros de la Virgen en el Perú
La Visita a los Monumentos - Jueves Santo
Un remedio eficaz contra la amnesia religiosa
Santidad: la verdadera gloria de Francisco y Jacinta



 



Tesoros de la Fe


Nº 255 / Marzo de 2023

Oh Virgen de la Guardia
Guarda nuestra fe y la inocencia de los niños

Nuestra Señora de la Buena Guardia, Basílica de Longpont-sur-Orge, en la región Île-de-France



Solicite aquí la visita de la Virgen Peregrina de Fátima




Santoral

23 de marzo

Santo Toribio de Mogrovejo, Obispo

+1606 Saña - Lambayeque, Perú. Eminente figura nacional que el país debería honrar más justamente. Gran Inquisidor de Granada, Arzobispo de Lima y misionero, consolidó la Religión Católica en gran parte del continente sud-americano.

Más información aquí.






Ayude a difundir el mensaje de Fátima
Alianza de Fátima | Donaciones | Solicite visita de la Virgen | Tienda Virtual

Campaña promovida por la Asociación Santo Tomás de Aquino
Tomás Ramsey 957, Magdalena del Mar - Lima - Perú
..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... ..... .....